Reseña: The Fast and The Furious: Tokyo Drift

“Soy una persona que prefiere la receta original, por lo que la de Rob Cohen es mi favorita. Pero, a decir verdad, le tengo mucho cariño a Tokyo Drift”. Estas son palabras de un invitado de lujo en el podcast HappySadConfused, Christopher Nolan. El reconocido director no es el único fanático, ya que después de Fast & Furious 7, Tokyo Drift es la cinta más discutida dentro de la franquicia. Sin embargo, para su mala fortuna, este legado de aprecio se ha ido construyendo a lo largo de los años. La cinta es la que menos dinero hizo en la taquilla mundial de la saga y también la única que fallo en hacer dos veces su presupuesto, convirtiéndola en un fracaso. Así que, con expectativas altas por tanta conversación y con expectativas bajas por su resultado en taquilla y las criticas mixtas en su estreno, por fin he visto Tokyo Drift. Así que, sin más preámbulos, les daré mi opinión.

Gracias por entrar a esta nueva reseña. Hoy escribo de The Fast and The Furious: Tokyo Drift, dirigida por Justin Lin y escrita por Chris Morgan. La historia nos introduce a un nuevo protagonista, Sean Boswell (Lucas Black), un adolescente que no puede evitar meterse en problemas debido a su gusto por las carreras. Sin embargo, debido a su cuestionable estilo de vida, Sean deberá mudarse a Tokio, en donde será un pez fuera del agua.

Con un firme paso hacia la correcta dirección. Tokyo Drift vuelve a traer los elementos que tanta falta le hicieron a la secuela y que hacían de la primera película una cinta que, al día de hoy, ha envejecido muy bien. Incluso me atrevería a decir que esta tercera entrega hace algunas cosas mejores que la película original.

Con una fotografía que hace lucir tanto a la ciudad que la convierte en un personaje más, Stephen F. Window entrega, en mi opinión, el mejor trabajo de las tres películas en cuanto a fotografía se refiere. El cambio de locación le sienta muy bien a la película, en gran medida al trabajo hecho por Stephen.

Dallas Puett vuelve para esta entrega y, junto a Kelly Matsumoto y Fred Raskin, logran redimir lo hecho en la antecesora.  Aunque en algunos aspectos hay reminiscencias a lo hecho por Honess en la primera entrega, la edición aquí es totalmente diferente a lo visto en la franquicia hasta el momento, sobre todo en las carreras. Ahora, en lugar de tener ese estilo sobre editado que busca el espectáculo, se le dé más importancia en hacer las competencias lo más claras posibles para el espectador. Esto, aunado con el regreso a la prioridad de efectos prácticos y con la dirección de Lin, que deja el suficiente espacio para que podamos sentirnos como un espectador mas entre las multitudes que ven estas competencias, hace que las carreras sean de lo mas disfrutable de la película.

Tokyo Drift de Teriyaki Boyz y Bandolero de Don Omar y Tego Calderón son las únicas dos canciones que recuerdan instantáneamente a la franquicia. Las escuchas y de repente ya tienes una corona en la mano, quieres ver a tu familia y te vuelves pelón. No es casualidad que estas dos canciones estén en esta película. Mientras en Rápidos y Furiosos 1 había un exceso de canciones esperando a que una se volviera icónica y en la secuela ahora no solo había menos, sino que las escogidas no quedaban con el tono de la cinta. Tokyo Drift encuentra el equilibrio perfecto entre escoger las canciones adecuadas sin excederse en la cantidad. Aunque, por alguna extraña razón que aun desconocemos, las canciones con licencia desaparecen un poco después de la mitad de la película.

Aunque no tengamos a Toretto, Letty, Brian o Mia como protagonistas, y sé que va a sonar muy irónico lo que estoy a punto de decir, pero no encontré otra forma mejor de decirlo:  la película aun se siente como parte de rápidos y furiosos debido a que entiende que uno de los componentes principales de la saga es la familia. Sean y Neela tienen una buena química debido a sus similitudes, y Han es el mejor personaje secundario que se nos ha presentado hasta el momento. Aparte, Tokyo Drift también tiene su justa cantidad de momentos que envejecieron irónicamente, los cuales aumentan el disfrute de la cinta.

Aunque en un principio el protagonista es francamente aburrido y que la decisión de castear al actor como adolescente deje como principiantes a Elite y a Euphoria no ayuda mucho, un buen desarrollo de personaje y un primer acto que, a decir verdad, es bastante disfrutable hacen que la monotonía que Sean presenta en varias ocasiones no pese tanto. No obstante, que sus motivaciones y las de Neela sean iguales a las de Toretto, es decir, “sentirse libres mientras manejan” termina siendo repetitivo y monótono.

Una vez vista la película, puedo entender las criticas tan diversas que recibió y de cierta forma también su fracaso. La falta de una trama policial o detectivesca se nota mucho, sobre todo al haber elementos como los Yakuza, los cuales son totalmente desaprovechados. Este desperdicio para una trama secundaria también hace que, conforme avance la película, el villano que en un principio parecería tener el potencial para ser icónico, se termine haciendo cada vez menos amenazante.

No solo hay falta de una trama secundaria, sino que en muchas ocasiones directamente no hay una historia a seguir por lo que, sobre todo en el segundo acto, Tokyo Drift no puede evitar sentirse como una recolección de carreras más que como una historia cohesiva. Esto es mucho más decepcionante sabiendo, que de acuerdo con Chris Morgan en una entrevista para Collider, la primera intención de la película era tener a Toretto como protagonista. Esta falta de argumento afecta mucho a la carrera final, ya que debido a la falta de construcción no se siente que haya algo en juego tan importante, como lo había en las dos entregas pasadas. Que el final sea simplemente una carrera en lugar de un robo o una persecución emocionante a un criminal se siente como un paso para atrás.

Esta fue, hasta ese momento, la cinta mas cara de las tres y, a diferencia de su antecesora, en donde un presupuesto mayor se alcanzaba apenas a notar al final, aquí si tuve un rato bastante difícil tratando de adivinar o pensar a donde se fue tanto dinero. Contrario a sus dos antecesoras, en Tokyo Drift varios de los problemas no se pudieron haber arreglando solamente quitando tiempo del producto final, sino más bien haciendo un cambio de guion entero.

En resumen, Tokyo Drift vuelve a demostrar el potencial que la franquicia tiene. La fotografía y el soundtrack son los mejores que he visto hasta el momento entre las tres películas. Además, la edición y dirección vuelven a hacer las escenas de carrera emocionantes. Sin embargo, un tercer acto débil y un guion que hace que la película se sienta en varias ocasiones solo como una recopilación de carreras, hacen que mi favorita aun siga siendo la primera entrega.

Mi calificación para The Fast and The Furious: Tokyo Drift es un 6

Sin nada más que decir, agradezco que hayas llegado hasta esta parte de mi reseña. Espero puedas leer la próxima y déjame saber sobre que estrenos, películas o temas relacionados al cine te gustaría que escribiera. Como siempre la opinión más importante es la tuya ¿estás de acuerdo conmigo? ¿a ti que te pareció The Fast and The Furious: Tokyo Drift?

Si te gusta mi contenido aquí te dejare un enlace a todas mis redes sociales, si me puedes seguir en ellas, así como en el blog, ¡lo agradecería mucho! Para contactarme, puedes mandarme mensaje a cualquiera de mis redes sociales o a mi correo electrónico presionando el icono de correo que se encuentra abajo de mis redes sociales.

Mi reseña anterior fue a “Evil Dead Rise”. Aquí te dejo el enlace por si gustas leerla: https://cincorama.wordpress.com/2023/05/01/resena-evil-dead-rise/

Fuentes:

Chitwood, A. (2020). Christopher Nolan Loves the Fast and Furious Franchise, Singles Out Tokyo Drift. Collider. https://collider.com/christopher-nolan-fast-and-furious-tokyo-drift/

Hood, C. (2020, 9 enero). Fast & Furious: Why Paul Walker Didn’t Return In Tokyo Drift. Screen Rant. https://screenrant.com/fast-furious-tokyo-drift-paul-walker-brian-return/

2 comentarios sobre “Reseña: The Fast and The Furious: Tokyo Drift

Deja un comentario